El Mundo en el 2014 volvió a los fantasmas del pasado que hablaban de fin de una era, al ver como un rayo impactaba y dañaba en la mano del Cristo Redentor de Río de Janeiro. O cuando una erupción solar dejaba sin voz a las radios. Y que decir de la imagen de un iceberg de 748 Km de longitud, que se ‘despegaba’ de la Antártida. Sin olvidarnos del despertar del volcán islandés de nombre de jefe de tribu africana (Bardarbunga) y el seísmo en la bahía de San Francisco. Algunos resucitaron a los Mayas y ‘recalcularon’ sus profecías.
En España, en cambio, empezamos el 2014 recibiendo a Barack Obama y lo acabamos viendo a Pablo Iglesias comandar un nuevo grupo político, de nombre Podemos.
El ‘Procés’, la abdicación y Excálibur
En verdad, tres hechos centraron la atención de los medios de comunicación aquel 2014. Primero, el famoso ‘Procés de Catalunya’. Empezó pronto, en enero, con la aprobación, por parte del Parlament, de la “competencia para autorizar, convocar y celebrar un referéndum sobre el futuro político de Cataluña”. Rechazado por el Congreso en abril. En julio, Mariano Rajoy y Artur Mas deciden reunirse para tratar el tema.
Mientras tanto, la Fiscalía Anticorrupción pide a Andorra y Suiza las cuentas bancarias de la familia Pujol y la canciller alemana, Ángela Merkel, en una visita a España, expresa rechazo a la consulta en Cataluña. Eso no amedrenta al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que en septiembre convoca oficialmente la consulta soberanista para el 9 de noviembre. Ante la insistencia en no consentirla por parte del Consejo de Estado, y recurso presentado por el Gobierno ante el Tribunal Constitucional, en octubre, Mas descarta la consulta. Pero propone organizar un ‘referéndum’
El 9N se celebra y sale el ‘Sí’ a que sea la independencia el 80,76 % y días después, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce, presenta una querella contra el President, por “organizar la consulta popular no vinculante”.
Mientras tanto, en junio el Rey don Juan Carlos I anuncia su abdicación. Pocos días después, es el nuevo Rey, don Felipe VI, quien jura la Constitución ante las Cortes Generales en una sesión solemne. Felipe VI se estrenó, como Rey en un acto oficial, en el Palacio de Zurbano, en el homenaje a las víctimas del terrorismo. Y, con la intención de intentar mejorar la imagen de la monarquía española, a finales de julio somete a auditoría “las cuentas de la Zarzuela y regula el código de conducta y un régimen de incompatibilidades para los miembros de la familia real”.
A tiempo se hizo todo, ya que en agosto, el ébola entró en acción. Desde Sierra Leona llegó el sacerdote Miguel Pajares, infectado por el virus. Fue trasladado directamente al Hospital Carlos III de Madrid. Al día siguiente, la OMS declara “la emergencia internacional ante el avance de la epidemia”. El 12 de agosto, falleció el sacerdote, convirtiéndose en la primera víctima mortal del ébola fuera de África.
En septiembre es repatriado otro español infectado: el misionero Manuel García Viejo. Pero las alarmas saltaron en octubre cuando se supo que Teresa Romero, auxiliar del hospital Carlos III, estaba también infectada por el ébola. En ese momento, el Ministerio de Sanidad activó el plan de emergencia sanitaria en Madrid y la Presidencia del Gobierno crea un comité de “gestión de crisis sanitaria”. Hubo algún que otro posible contagio, entre los que estaba el perro de la auxiliar: Excalibur. El animal fue sacrificado y algunos protestaron por ello.
Seguimos en los juzgados y políticos que darán que hablar
2014 siguió siendo un año de juzgados y declaraciones. En febrero fue la Infanta Cristina la que tuvo que acudir a los juzgados de Palma de Mallorca por el Caso Nóos. La corrupción seguía ocupando los primeros lugares en las noticias y en verano, Jordi Pujol admitió que tuvo dinero suyo en paraísos fiscales. En el caso Palma Arena, Jaume Matas, ingresa en la prisión por tráfico de influencias. Y en agosto, 17 personas son imputadas por el caso MadridArena. incluido el jefe de la policía de Madrid.
En octubre, aparece la Operación Púnica, que investiga el supuesto cobro de comisiones ilegales. De la política se pasa al mundo del espectáculo cuando la Audiencia de Málaga ordenó el ingreso en prisión de Isabel Pantoja, por un delito de blanqueo de dinero. Y el año se cerró con Manuel Cháves y Jose Antonio Griñán investigados por el Caso Ere y Carlos Fabra ingresó en prisión por fraude fiscal.
Fuera de los juzgados, dos personajes salieron a escena ese año y serán muy protagonistas en los siguientes. En verano, las primarias del Partido Socialista colocaron a Pedro Sánchez al frente del partido en la oposición. Y en noviembre, un nuevo partido político nació y permitió a Pablo Iglesias, como su secretario general, empezar a acaparar minutos en las noticias. Por contra, nos dejó Adolfo Suárez González, quien fuera presidente del Gobierno desde 1976 hasta 1981.
Económicamente, España estaba recuperándose ya de la crisis. Muestra de ello es que el FMI duplicó el crecimiento estimado para España para los dos próximos años. El Banco de España certificó a su vez que el PIB español estaba creciendo un 0,5 por ciento y lanzaba unas previsiones de continuidad para el 2015. Y todo este buen presagio de mejora, se ve reflejado en la creación de empleo por encima de los 1.000 puestos de trabajo al día. Volviendo a los parámetros que se tenían antes de la crisis (2007).
Y es que, a nivel laboral, el Gobierno seguía lanzando reformas. Como la Ley 1/2014, de 28 de febrero “para la protección de los trabajadores a tiempo parcial y otras medidas urgentes en el orden económico y social”. O la Ley 3/2014, de 28 de febrero, “de medidas urgentes para el fomento del empleo y la contratación indefinida”. Y el Real Decreto ley 16/2014, de 19 de diciembre, “por el que se regula el Programa de Activación para el Empleo”. A estas nuevas normativas se unió, para la mejora del empleo, la propuesta del Consejo Empresarial para la Competitividad, de un “plan de choque” en el que se presentaban una serie de medidas económicas e institucionales, con el objetivo de “reducir el desempleo un 11% antes de finales de 2018”. Y el acuerdo, a final de año, Gobierno-Sindicatos-Patrona de una prestación a los parados de larga duración.
Ucrania y la salida de la crisis
A nivel internacional. Los gobiernos de Venezuela y Ucrania viven momentos de tensión social. Por un lado, la oposición a la dictadura de Maduro va creciendo por momentos y el régimen actúa de forma violenta contra las manifestaciones. Lo mismo ocurría en Ucrania, entre los partidarios de pertenecer a Rusia y los que quería seguir independientes y pertenecer a Europa. Dos bandos que se enfrentaron en armas en una de las zonas del país, obligando a la intermediación internacional.
En abril, la Unión Europea y Estados Unidos sentaron a ambos países (Rusia y Ucrania), hasta que alcanzaron un acuerdo. En él, Ucrania cambiaría la Constitución para darle una estructura federal al país, de forma que se “garantizara el respecto de las minorías”. A cambio, Rusia se comprometía a “desarmar las milicias prorrusas y desalojar los edificios oficiales”. Tras varios pequeños enfrentamientos todavía, finalmente, en septiembre, en la conflictiva ciudad de Minsk, gobierno y milicias firmaron un alto el fuego.
Europa, además de a Ucrania, miraba atentamente su economía. El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi realizó varias acciones ese año que ayudaron a la mejora económica. Por ejemplo, en abril declaró su intención de “usar instrumentos no convencionales dentro de su mandato para hacer frente a los riesgos de un periodo demasiado prolongado de baja inflación”. Un mes después anunció que el BCE tomaría “medidas extraordinarias si se mantiene el riesgo de deflación en la eurozona”. Palabras que tranquilizaron a la Bolsa. Antes de verano avanzó un plan para “reactivar la economía europea, debilitar el euro frente a otras divisas y hacer frente al riesgo de deflación. Y a la vuelta de las vacaciones, presentó otra serie de medidas para acabar con el riesgo de deflación en la zona euro.
El Badmintón toma protagonismo
Sin duda que el 2014 fue el año de Carolina Marín. Gracias a ella, muchos jóvenes descubrieron el badmintón y empezaron a practicarlo. La onubense entró con fuerza ya que ese año se proclamó campeona de Europa y del Mundo en este deporte. Destronando a las asiáticas. Su mérito fue reconocido por todos y se le concedió el Premio Nacional del Deporte a la mejor deportista española y la Medalla de Bronce de la Real Orden del Mérito Deportivo.
En fútbol, Real Madrid y Atlético de Madrid jugaron la segunda final española de la Liga de Campeones. Cayendo la décima para los blancos. Y fue año de Mundial, en Brasil… Pero ganó Alemania. Para el recuerdo quedó el 7-1 que los germanos infringieron a la canarinha. En lo que se llamó el Mineirzao. Ese año, el 2014, nos dejó una de las leyendas del fútbol: Alfredo Di Stéfano.
El Valencia Basquet se llevó una nueva Eurocup y en el Rally Dakar, Marc Coma se llevó su cuarto triunfo en la categoría de motos, mientras Nani Roma estrenaba título en coches.
Nos dejó Gabriel García Márquez y Robin Williams
El mundo de las letras estuvo de luto en el 2014, por el fallecimiento, a los 87 años, del premio Nobel de literatura Gabriel García Márquez. Otro que nos dejó también, de forma inesperada por las causas, fue Robin Williams. El actor se suicidó tras una depresión y asumir, al mismo tiempo, que sufría Parkinson.
Ese año, Gravity fue la película que más estatuillas se llevó en los Oscars (7). Aunque el de Mejor película fue para 12 años de esclavitud que solo ganó 3. En los Goya, por su parte, Las brujas de Zugarramurdi ganó ocho premios, pero fue Vivir es fácil con los ojos cerrados, con seis, la que se llevó a la Mejor Película.
En el mundo de la música, recordaremos ese año Eurovisión, gracias a Thomas Neuwirth. Ganó para Austria este concurso con su personaje de Conchita Wurst, una mujer barbuda, y la canción Rise Like a Phoenix .
En los Grammy’s, los triunfadores fueron el dúo francés de música electrónica Daft Punk, con cinco galardones. Al disco del año por Random Access Memories o la grabación del año por Get Lucky entre otros. En segundo lugar quedaron Macklemore y Ryan Lewis con cuatro galardones. Y la Canción del Año fue para neozelandesa Lorde, con Royals.
En las radios y discotecas españolas Pharrell Williams logró mantener en el número uno con su Happy cuatro semanas no consecutivas. Mientras que Jason Derülo consiguió ser número uno con tres canciones distintas (Talk Dirty, Trumpets, Wiggle).